Tras meses sufriendo lesiones durante la práctica deportiva, la canoa no ha tenido más remedio que hacer un pequeño paréntesis para recuperarse en las prestigiosas instalaciones DAV-I+D en donde un aclamado cirujano y traumatólogo va a intentar devolverla a un estado aceptable de salud para poder volver a realizar las arriesgadas maniobras a las que la someten sus dos propietarios.
Tras un primer examen el pronóstico es reservado. Parece ser que la canoa tenía multitud de daños internos graves. Esperemos que la suerte y el buen hacer de DAV-I+D hagan que nuestra querida canoa vuelva a ser la misma de antes o incluso mejor.
Os pongo unas fotos cedidas por el cirujano plástico de su primer examen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario